sábado, 25 de octubre de 2025

Módulo 3, clase 2. Del Castigo a la Responsabilidad: Modelos de Intervención y la Centralidad de la Violencia Simbólica en el Trabajo con HEV

  

Este material es una síntesis organizada a partir de notas de clase de la segunda unidad del tercero de tres módulos que integran la Diplomatura en Masculinidades 2025, titulada "Intervenciones en Violencias basada en Género". La Diplomatura es dictada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT).

La segunda unidad del Módulo 3, "Intervenciones en Violencias basada en Género", dictada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Diplomatura en Masculinidades 2025 de la UNT, se centró en establecer las "bases comunes de las estrategias de intervención" para programas de atención a Hombres que Ejercen Violencia (HEV). El objetivo primordial de la clase fue que los participantes comprendieran "por qué lo hacemos y desde dónde lo hacemos", articulando los fundamentos teóricos con los metodológicos. La unidad se propuso ir más allá de los modelos punitivos, buscando un enfoque transformador que produzca cambios genuinos mediante el reconocimiento y la responsabilidad. Para ello, se abordó la relevancia del Modelo Ecológico y, como concepto central para el diagnóstico e intervención, la violencia simbólica, definida como aquella que "legitima jerarquías y desigualdades" y que pasa inadvertida para los involucrados.


 

I. Hacia un Enfoque de Intervención Transformadora (Gabriela Córdoba)

La clase enfatizó la necesidad de superar los modelos punitivos o meramente correctivos. Históricamente, las intervenciones se han centrado en la sanción penal, pero "el castigo por sí solo no modificaba los patrones de comportamiento de los varones ni prevenía futuras violencias".

Proposiciones Centrales del Enfoque Transformador:

  • Responsabilidad Subjetiva: El desafío es pasar de la denuncia del privilegio a la "construcción de la responsabilidad" en los varones. Si se reduce al varón a la categoría de "monstruo" o "victimario", se "cierra la puerta a cualquier posibilidad de cambio".
  • Articulación Ética: El camino transformador debe articular la "firmeza en los límites" con una "ética relacional que promueva la reparación y la responsabilidad". La intervención es inherentemente "política y ética".
  • Crítica al "Bajar Línea": Los facilitadores que solo se enfocan en lo normativo ("bajan línea") sin buscar la implicación emocional del varón, no producen cambios porque el sujeto "no se ha implicado".

II. Fundamentos Teóricos: Modelos de Intervención (Darío Casals)

Darío Casals presentó los fundamentos teóricos más importantes para la intervención.

1. Modelo Ecológico (Visión Sistémica)

Este modelo es clave porque concibe la violencia como un fenómeno multicausal y sistémico, y no como un "accidente individual". Obliga a situar al varón en una red de influencias interdependientes. Considera cuatro niveles de influencia:

  • Nivel Individual: Historia de maltrato, consumo de sustancias, gestión de impulsos y la internalización de la creencia de que los hombres deben controlar y dominar.
  • Nivel Relacional/Familiar: Dinámicas inmediatas donde se reproduce el poder de género (ej., celos y dependencia).
  • Nivel Comunitario: Entornos (escuela, trabajo) que legitiman la desigualdad a través de omisiones y complicidad estructural.
  • Nivel Social/Estructural (Macrosocial): Factores como el patriarcado, la pobreza y las políticas neoliberales que sostienen la violencia.

2. Modelo con Perspectiva de Género

Este enfoque es fundamental para desmontar la creencia de que la violencia es biológica (testosterona, mal carácter) y reconocer que es una "práctica cultural" posicionada sobre los hombres.

  • Los Tres Pilares Estructurales: La violencia se sostiene en el trabajo como eje identitario (su pérdida desestabiliza al varón y puede llevarlo a ejercer control hacia la pareja), la socialización de género infantil (aprendizaje de que la fuerza afirma la identidad) y las redes familiares y comunitarias.
  • Desigualdad Persistente: Casals refutó enfáticamente la creencia de que la igualdad de género ya es un hecho (por tener leyes o votar), declarando: "Estamos muy lejos de la igualdad de género. Muy lejos".

3. Modelo Cognitivo Conductual (TCC)

Es el modelo más difundido en Argentina. Se enfoca en modificar pensamientos y conductas violentas (ej., reestructuración cognitiva, tiempo afuera o retiro avisado). Sin embargo, se critica por ser "corto" ya que corrige la conducta sin profundizar en las raíces estructurales de la violencia.

III. El Concepto Central: Violencia Simbólica

Darío Casals introdujo la violencia simbólica como un concepto clave para la intervención.

  • Inconsciencia y Legitimación: Es un ejercicio de poder que ocurre en un "escenario naturalizado y de legitimidad" para ambos, el victimario y la víctima, quienes no son conscientes de estar en una situación violenta.
  • Ausencia de Intención Consciente: El varón no tiene una "voluntad consciente de dominio", y la dominación es "sofisticada", con la víctima convencida de que las intenciones del victimario son buenas.
  • Discurso Políticamente Correcto: Este tipo de violencia es "amortiguada, disfrazada, maquillada" y presentada a través de un "discurso políticamente correcto". Un ejemplo es cuando la mujer deja su desarrollo profesional por un acuerdo familiar, reforzando el "orden natural de las cosas".

IV. Desmontando el Privilegio y los Costos de Ser Varón (Gabriela Córdoba)

Gabriela Córdoba complejizó la noción de privilegio, argumentando que centrarse solo en la renuncia a los beneficios masculinos es reduccionista y genera resistencias.

  • Las Desventajas: Es necesario visibilizar los costos asociados a ser varón, como el empobrecimiento afectivo, relacional y subjetivo, la coraza emocional que tapa lo que duele, y el sentimiento de estar "atrapado en una identidad que ya no les sirve".
  • La Ética del Cuidado: El enfoque de la ética del cuidado (Carol Gilligan) busca que el varón tome conciencia de que su violencia ha generado la "ruptura de un lazo humano". La reparación debe ser una "respuesta ética al sufrimiento causado".

V. Herramientas Prácticas para la Responsabilización (Gabriela Córdoba)

La intervención transformadora se materializa mediante herramientas que promueven la conciencia del daño concreto:

  1. El Mapa del Impacto: El varón dibuja su entorno familiar y social y "colorea" los lugares donde su conducta violenta impactó negativamente. Este ejercicio introduce la dimensión y la magnitud del daño. El objetivo es que el varón piense "qué estrategias reemplazarían de esas violencias para tener prácticas de cuidado".
  2. La Carta de Reparación: Ejercicio simbólico y no entregable. El varón debe describir un acto de violencia específico, reflexionar sobre su proceso subjetivo, el impacto en la víctima y ofrecer "compromisos concretos de cambio".

VI. Rigor Metodológico y Crítica a la Reproducción de Estereotipos

En la discusión sobre un video de intervención, los participantes realizaron una crítica profunda a los riesgos de una mala metodología.

  • Violencia de Autoridad y Cosificación: Se criticó la violencia de autoridad ejercida por el adulto al direccionar la conducta de los niños, y la cosificación y sexualización de la niña, quien aparece como un "objeto de experimento".
  • Refuerzo de Estereotipos: La justificación dada por los niños ("No la puedo golpear porque es una niña") fue señalada como problemática, ya que frena la violencia solo contra las mujeres, pero no la violencia en sí misma. El consenso fue que "en realidad no se le tiene que pegar a nadie". Este enfoque reproduce el estereotipo de la niña como frágil y del varón como protector. El video, aunque bienintencionado, puede utilizarse con adultos únicamente para "demostrar cómo una buena intención puede naufragar o una mala metodología".

 

Conclusión

La segunda unidad proporcionó una hoja de ruta esencialmente "política y ética" para la intervención con HEV, rechazando la noción de que el castigo "por sí solo no modificaba los patrones de comportamiento". Darío Casals revisó los fundamentos teóricos, destacando el Modelo Ecológico por concebir la violencia como multicausal y sistémica, situando al varón en una "red de influencias interdependientes" que abarcan lo individual, relacional, comunitario y macrosocial (patriarcado y políticas neoliberales). Casals también enfatizó que la violencia es una "práctica cultural" y no biológica, sustentada en la socialización de género y la ligazón del trabajo como "eje articulador" de la identidad masculina.

Centralmente, se introdujo la violencia simbólica, definida como el ejercicio de poder que ocurre en un escenario "naturalizado y de legitimidad" para ambos miembros, caracterizado por la "ausencia de la intencionalidad consciente de dominar". Esta dominación es "amortiguada, disfrazada, maquillada" y presentada con un "discurso políticamente correcto".

Gabriela Córdoba delineó la "intervención transformadora" como el punto de llegada, la cual debe articular la "firmeza en los límites" con una "ética relacional que promueva la reparación y la responsabilidad". El enfoque transformador exige que el varón asuma la "responsabilidad plena por los propios actos", superando la crítica a los enfoques meramente cognitivos, los cuales "se queda[n] como si fuese una conducta únicamente de ese varón". Además, Córdoba advirtió que los facilitadores que solo "bajan línea" no producen cambios porque el sujeto "no se ha implicado" emocionalmente.

Para lograr esta implicación genuina, la unidad propuso herramientas concretas. El "Mapa del Impacto" permite al varón visualizar la "dimensión y magnitud" del daño en su entorno social y familiar, promoviendo la "responsabilidad en una cuestión concreta". El objetivo final es que el varón piense "qué estrategias reemplazarían de esas violencias para tener prácticas de cuidado". Por último, la "Carta de Reparación" (que es "no entregable") fomenta la reflexión sobre el proceso subjetivo del varón y el "compromiso genuino" para "reconstruir algo que se rompió". Este enfoque integral se sostiene en una ética que visibiliza tanto los privilegios como el "empobrecimiento afectivo" de los varones, buscando la "transformación del sujeto" y no una mera "adaptación superficial" a las expectativas del programa.

 

sábado, 18 de octubre de 2025

Modulo 3, clase 1. Violencia, Poder y el Desafío Neoliberal: La Raíz Estructural de la Agresión y la Apuesta por la Colectividad

 

Este material es una síntesis organizada de la primera clase (Unidad 1) del tercer y último módulo de la Diplomatura en Masculinidades 2025, titulada "Intervenciones en Violencias basada en Género". La Diplomatura es dictada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT).

La Unidad 1 de la Diplomatura en Masculinidades 2025, titulada "La violencia basada en género como socializador patriarcal y neoliberal", marcó el inicio del Módulo 3: "Intervenciones en Violencias basada en Género". Dictada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la UNT, la clase se centró en la urgente necesidad de trabajar con varones que ejercen violencia (HEV). La metodología propuesta evita el castigo y la culpa, y se enfoca en "problematizar las relaciones de poder" y comprender qué sostiene estas prácticas "desde la pregunta". El análisis se basa en la "triada fundacional" (patriarcado, capitalismo y neoliberalismo) que naturaliza la violencia, buscando revisar los fundamentos teóricos y construir herramientas concretas para el cambio y la reparación. El propósito es desnaturalizar las prácticas abusivas, ya que el mundo construido puede ser transformado.

 

I. Objetivos Centrales y Marco Conceptual del Módulo

El Módulo 3 se enfoca en el complejo y urgente trabajo con varones que ejercen violencia (HEV). La propuesta metodológica es problematizar las relaciones de poder, evitando una aproximación basada en la culpa o el castigo, y centrándose "desde la pregunta" para intentar comprender qué sostiene estas prácticas.

Los objetivos específicos del curso son:

  1. Revisar los fundamentos teóricos para generar espacios donde el varón pueda revisarse, responsabilizarse y reparar.
  2. Construir herramientas concretas para el trabajo individual y grupal con HEV.
  3. Analizar la Violencia Basada en Género (VBG) desde una perspectiva crítica y profunda.

La Unidad 1, titulada "La violencia basada en género como socializador patriarcal y neoliberal", se dedicó a exponer cómo el patriarcado, el capitalismo y el neoliberalismo configuran representaciones psíquicas que naturalizan la violencia en la socialización masculina.

II. La Tríada Estructural y el Dominio Internalizado

Darío Casals presentó la violencia como un fenómeno sostenido por una "triada fundacional" (patriarcado, capitalismo y neoliberalismo) que articula nuestro sistema social. El análisis se centró en cómo el neoliberalismo ha redefinido el poder y la opresión, impactando directamente en la subjetividad masculina.

La Sociedad del Rendimiento y la Autoexplotación: El neoliberalismo dio paso a la "sociedad del rendimiento" (Byung-Chul Han), donde la productividad y la rentabilidad lo invaden todo. El aspecto más crítico de este sistema es el fenómeno de la autoexplotación. El sujeto pasa a ser su propio explotador (amo y esclavo a la vez), impulsado por el lema "tú puedes y tú tienes que optimizarte".

  • Neoliberalismo Psicopolítico: Este mecanismo transforma la supuesta libertad individual en una "coacción interna" para rendir, lo que significa que el sujeto no se siente oprimido por una fuerza externa.
  • Consecuencia y Resistencia: Esta autoexigencia lleva al agotamiento y el colapso. Ante la incertidumbre de cómo salir de este sistema, Jorge Baletti y Darío Casals coincidieron en que la colectividad y "armar comunidad" son la salida, buscando tocar el punto más atacado por el sistema, que es lo comunitario.

III. La Violencia como Construcción de la Masculinidad

La clase abordó la conceptualización de la violencia masculina como un comportamiento aprendido, no innato, que es reforzado por el mandato hegemónico.

1. Conceptualización:

  • Agresividad vs. Violencia: Darío Casals diferenció la agresividad (una fuerza disponible para crear, preservar y proteger la vida) de la violencia (una construcción social con intención de dañar, controlar o dominar).
  • VBG: La Violencia Basada en Género es la manifestación más extrema de las relaciones de poder desiguales, que afecta a la víctima debido a su identidad, expresión de género u orientación sexual. Casals enfatizó que la violencia entre hombres también es violencia basada en género.

2. Socialización en el Dominio:

  • Aprendizaje y Jerarquía: Desde la infancia, los varones son introducidos en prácticas de violencia (como "juegos de mano") que escalan hacia formas vinculares de dominación.
  • La Hermandad Masculina: El varón tiene un "miedo muy arraigado" a perder su estatus ante otros hombres. Para evitar la exclusión, debe "espectacularizar su potencia" y mantener una reafirmación permanente de ese control y dominio. El costo de no cumplir el mandato es que "los changos... te pueden quitar la credencial de macho y dejarte afuera".
  • La Tríada de Kaufman: La masculinidad hegemónica genera tres tipos de violencia:
    1. Contra mujeres y sujetos inferiores: Para mantener la jerarquía y el control.
    2. Entre hombres: En la lucha por la jerarquía masculina.
    3. Contra sí mismos: Producto de la represión emocional (ej. suicidios, consumo excesivo de riesgo).

IV. Política, Reacción y Desplazamiento de la Responsabilidad

La Unidad 1 integró un debate sobre el contexto político actual, la reacción masculina conservadora y los mitos que perpetúan la violencia.

1. La Capitalización de la Vulnerabilidad Social: Jorge Baletti criticó que los sectores progresistas han olvidado las "vulnerabilidades reales" relacionadas con las "condiciones materiales de la existencia". Este vacío fue capitalizado por la derecha radical, transformando esta vulnerabilidad en "rabia, en furia".

  • Voto Joven Antifeminista: Estudios citados por Casals indican que los jóvenes varones votan a la extrema derecha, en gran medida, para "ir en contra del feminismo". Casals aclaró que esta reacción se dirige al "feminismo radical", que es una parte "muy muy pequeña" del movimiento, pero que "hace mucho ruido".
  • Masculinidad Agraviada: Esta reacción es un síntoma de la "masculinidad agraviada" (Michael Kimmel), un sentimiento de pérdida y resentimiento que percibe los avances de la igualdad como una amenaza a sus privilegios históricos.

2. Mitos que Exoneran al Agresor: La clase deconstruyó los mitos que buscan desplazar la responsabilidad de los HEV. Estos mitos actúan como justificaciones culturales:

  • "Pierde el control": Se refuta señalando que la violencia es selectiva (no se ejerce con jefes o policías) y, por ende, es una táctica aprendida para ejercer control, no una pérdida del mismo.
  • "Es provocado por ella": Peligrosa justificación que traslada la responsabilidad a la víctima.
  • "Viene de una familia violenta": Utiliza la historia personal como predestinación para exonerar la responsabilidad del agresor.

V. La Propuesta Metodológica para la Intervención

Gabriela Córdoba resumió el imperativo metodológico para el trabajo en el Módulo 3, destacando la necesidad de rigor conceptual y desnaturalización.

  • Desfamiliarizar lo Familiar: Es necesario "apostar a lo que que llamamos en la sociología desfamiliarizar lo familiar". La lógica es que "el mundo que habitamos es construido y entonces puede ser transformado".
  • Rigor Conceptual: Es crucial evitar una "ensalada muy mezclada" donde se confunden la crueldad, la perversión, la psicopatía y la idea de que "todos los hombres son así". Es necesario "empecemos a definir y a precisar, para consensuar ciertas cuestiones".
  • El Trabajo con HEV: Las estrategias de intervención (individual y grupal) deben enfocarse en el Reconocimiento de los actos violentos y la Responsabilización del varón, desarmando los mandatos hegemónicos y fomentando la conciencia de género. El trabajo grupal, en particular, ofrece un "laboratorio ético" para ensayar nuevas formas de masculinidad.

 

 

Conclusión

La Unidad 1 concluyó que la violencia de género no es un accidente, sino la consecuencia lógica de una "triada fundacional" —patriarcado, capitalismo y neoliberalismo— que organiza el sistema social y cultural. Darío Casals profundizó en cómo el neoliberalismo psicopolítico establece la "sociedad del rendimiento" mediante la autoexplotación, donde el sujeto se convierte en su propio explotador y no siente opresión externa, lo que lo lleva al agotamiento y colapso. Esta crisis existencial y la omisión de la "vulnerabilidad real" (condiciones materiales de existencia) por parte de sectores progresistas ha sido capitalizada por la derecha radical, transformando el desamparo en "rabia, en furia", evidenciado en la tendencia de jóvenes varones a votar a la extrema derecha para "ir en contra del feminismo radical".

La clase subrayó que la violencia masculina es un comportamiento aprendido, no innato, reforzado por el mandato de la masculinidad hegemónica. Este mandato exige la "espectacularización" de la potencia ante la "hermandad masculina" por el miedo a perder el estatus y ser excluido. El modelo de Michael Kaufman ilustró que la violencia tiene tres caras: contra mujeres, entre hombres (por jerarquía) y contra sí mismos (represión emocional y conductas de riesgo). Además, esta violencia se extiende, en ocasiones, a la crueldad con animales o la naturaleza.

Ante la dificultad de resistencia a un sistema cuya lucha se ha vuelto interna, Jorge Baletti propuso que la salida es la colectividad y "armar comunidad", tocando el punto más atacado por el sistema neoliberal. Metodológicamente, se requiere "desfamiliarizar lo familiar" y definir con rigor nociones clave como crueldad, perversión y psicopatía, para evitar una "ensalada muy mezclada", permitiendo así la transformación del modo de ser varón y la construcción de la responsabilidad. El curso, en resumen, plantea una demanda ética de rigor conceptual para avanzar hacia la intervención.

 

Reseñas bibliográficas de libros en el módulo 3, Diplomatura Masculinidades C&C 2025

 

Unidad 1

Las reseñas bibliográficas a continuación corresponden a los textos teóricos analizados en la Unidad 1. La violencia basada en género como socializador patriarcal y neoliberal, y constituyen la bibliografía teórica utilizada en el dictado del tercero de tres módulos de la Diplomatura en Masculinidades desarrollada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Universidad Nacional de Tucumán, dictada en 2025.

 

1. Reseña: Introducción al trabajo con varones que ejercen violencia: Lo que hay que tener en cuenta para la intervención profesional

  • Nombre de la Obra: Introducción al trabajo con varones que ejercen violencia: Lo que hay que tener en cuenta para la intervención profesional (basado en fragmentos de Intervenciones profesionales con varones que ejercen violencia: Abordajes de la institución).
  • Autor: Lic. Sandro Comba (Lic. en Psicología, asociado al Ministerio de la Mujer - Centro Integral de Varones, Córdoba).
  • Año de Producción: c. 2021.

Contexto en la Diplomatura Esta obra es fundamental para la Unidad 1 de la diplomatura, ya que aborda directamente la pregunta central: "¿Qué se puede hacer frente a la VBG? Enfoque individual y enfoque grupal". El texto proporciona un modelo práctico y legal para la intervención con varones que ejercen violencia (VEV).

Análisis de Contenido El trabajo de Sandro Comba describe la metodología de intervención desarrollada en el Centro Integral para Varones (CIV) en Córdoba, Argentina. La práctica se fundamenta en un claro posicionamiento político y ético que integra la perspectiva de género, los derechos humanos y la salud pública. Estas intervenciones complementan la atención tradicional que el Estado brinda prioritariamente a las mujeres en situación de violencia.

El objetivo central del abordaje es generar un cambio en las creencias y conductas de los varones, promoviendo la responsabilización y la deconstrucción de identidades patriarcales. La intervención se realiza mediante un equipo interdisciplinario, típicamente compuesto por un psicólogo y un trabajador social.

La herramienta fundamental es la entrevista profesional, la cual tiene como objetivos la valoración del riesgo de reincidencia y el acuerdo de un proceso terapéutico. Para la valoración de riesgo, se utilizan instrumentos reconocidos internacionalmente y probados, tales como el S.A.R.A. y el HCR-20. Adicionalmente, se emplea el Modelo Transteórico del Cambio (de Prochaska y Diclemente) para evaluar la etapa motivacional del entrevistado, lo cual es clave para definir el tipo de abordaje.

El documento enfatiza los mecanismos de defensa comunes en la primera etapa de la entrevista (culpabilización de la mujer, racionalización o negación). El rol del profesional es motivar una crisis de concepciones mediante la reflexión sobre las ideas machistas, culminando idealmente con la aceptación de la responsabilidad.

Los principales dispositivos de intervención son grupales:

  1. Grupo de Intervención Motivacional: Dirigido a varones con alto riesgo que no reconocen su violencia o no están motivados al cambio, buscando generar la problematización.
  2. Grupo Psicosocio-educativo o de Reflexión: Considerado el "alma del trabajo" en el CIV (programa de un año, 56 sesiones), destinado a desaprender prácticas violentas y confrontar concepciones culturales.

El horizonte de trabajo es promover la equidad y la igualdad entre varones y mujeres, priorizando la minimización del daño hacia la familia.

 

2. Reseña: Apuntes sobre homofobia e intersubjetividad masculina en la articulación entre la violencia inter e intra-género

  • Nombre de la Obra: Apuntes sobre homofobia e intersubjetividad masculina en la articulación entre la violencia inter e intra-género.
  • Autor: Matías de Stéfano Barbero (CONICET – Instituto Interdisciplinario de Estudios de Género, UBA).
  • Año de Edición: 2018.

Contexto en la Diplomatura Este texto se integra a la Unidad 1 para analizar los "Mitos, patrones y representaciones que naturalizan la violencia en la socialización genérica masculina". Su valor radica en desentrañar el mecanismo psicosocial que conecta la violencia sufrida por el varón con la violencia que ejerce.

Análisis de Contenido El trabajo de Matías de Stéfano Barbero establece que la violencia ejercida por hombres cis heterosexuales contra mujeres (inter-género) y la violencia ejercida entre hombres (intra-género) están intrínsecamente conectadas. La homofobia es conceptualizada como el instrumento central que configura la intersubjetividad masculina, siendo crucial para construir y mantener la masculinidad hegemónica.

El autor suscribe la definición de masculinidad hegemónica de Connell y Messerschmidt, entendiéndola como aquella que legitima y reproduce la inequidad tanto entre hombres y mujeres como entre las propias masculinidades.

Se destaca la centralidad de la intersubjetividad masculina, donde la experiencia del varón es continuamente modulada en relación con sus pares. El papel del "policía de género" (el otro masculino) es fundamental, ya que amenaza al varón con devolverlo a una posición subordinada mediante la homofobia si no adhiere a la dominación.

La violencia se presenta como un continuum que permite a los hombres ascender en la jerarquía masculina. Para progresar en esta jerarquía, la validación está íntimamente ligada a la heterosexualidad y el respeto ganado entre otros hombres, no necesariamente ante las mujeres.

Mediante el análisis del caso narrativo de Martín, el texto ilustra cómo la victimización sufrida en la infancia (siendo llamado "pato" o "débil") se articula con el ejercicio posterior de la violencia inter-género. Martín, al ser observado por la chica que le gustaba, usó la violencia contra un par para defender acríticamente su heterosexualidad y construir una posición hegemónica. El ejercicio de la violencia de pareja se exacerba por la mirada de otros hombres, ante el miedo a la burla.

La hipótesis central es que la homofobia, en la dimensión intersubjetiva de la masculinidad, es el mecanismo que articula la violencia intra-género con la inter-género. La masculinidad hegemónica es una posición de poder que puede ser deconstruida. Sin embargo, el abandono de la violencia puede generar en el varón sentimientos de "impotencia" y la pérdida del "poder" y "respeto" que esta le confería. El trabajo plantea la necesidad de construir alternativas a la ética de la dominación.

 

3. Reseña: Aspectos teóricos de la violencia masculina: Machismo

  • Nombre de la Obra: Aspectos teóricos de la violencia masculina: Machismo.
  • Autores: Gloria González-López y Mathew C. Gutmann.
  • Año de Edición: 2020 (en español, publicado en el libro Estudios sobre la violencia masculina; original de 2005).

Contexto en la Diplomatura Esta obra contribuye a la Unidad 1 en la sección de "Conceptualizaciones de violencia basada en género". El texto proporciona una mirada crítica sobre el uso del término machismo como etiqueta conceptual y cultural para describir el sexismo masculino.

Análisis de Contenido González-López y Gutmann ofrecen una crítica incisiva sobre la historia y el uso académico del concepto "machismo". Concluyen que es una etiqueta culturalmente chauvinista y elitista, relativamente nueva (datando solo de unas décadas en el siglo XX).

El punto principal de la crítica es que el término ha sido utilizado de manera etnocéntrica y racista por la academia norteamericana para estereotipar a los hombres latinos. Al etiquetar el sexismo extremo a una u otra cultura, se corre el riesgo de un subterfugio racista, implicando que los hombres de habla hispana son inherentemente más sexistas que otros. Esta práctica es el resultado de la tendencia a "estudiar a quienes están localizados abajo" en la estructura de poder (poblaciones marginadas) y encontrar errores sociopolíticos en ellas.

Los autores señalan la necesidad de distinguir entre macho y machismo en el contexto latinoamericano. Mientras que macho puede tener connotaciones contradictorias, incluso positivas para las generaciones mayores (responsable económico), machismo se popularizó de forma extensa en América Latina solo hasta los años 90.

El texto también critica el paradigma Machismo-Marianismo, donde este último (inventado en 1973 a imagen del machismo) representa la sumisión femenina. Ambos conceptos son esencialistas y promueven la inequidad de género, habiendo sido desacreditados. Su aplicación simplista a personas de origen latinoamericano, especialmente de clase trabajadora, representa una mentalidad intelectual colonial en las ciencias sociales. En resumen, el texto insta a una conceptualización de la violencia masculina que evite etiquetas culturalmente cargadas y universalice la comprensión del sexismo.

 

4. Reseña: La sociedad del cansancio

  • Nombre de la Obra: La sociedad del cansancio (Título original: Die Müdigkeitsgesellschaft).
  • Autor: Byung-Chul Han.
  • Año de Edición: 2012 (en español).

Contexto en la Diplomatura Esta obra filosófica se incluye en la Unidad 1 para analizar "La tríada patriarcado-neoliberalismo-capitalismo como estructura de la socialización de género". El texto proporciona un marco crítico para entender la violencia sistémica y la autoexplotación que caracterizan la modernidad tardía bajo el régimen de rendimiento.

Análisis de Contenido Byung-Chul Han postula que la sociedad occidental ha transitado de la sociedad disciplinaria (regida por la negatividad, la prohibición y el "no-poder") a la sociedad de rendimiento (Leistungsgesellschaft), que opera bajo un exceso de positividad, motivación y el imperativo del "poder" (Können).

La patología distintiva de esta nueva era no es infecciosa, sino neuronal, manifestándose como depresión, TDAH, TLP y SDO (Burnout). Estas enfermedades son resultado de la violencia sistémica e inmanente generada por la autoexplotación. El sujeto de rendimiento se explota a sí mismo creyéndose libre, lo que convierte la libertad paradójicamente en violencia.

El texto utiliza el mito de Prometeo para ilustrar esta condición: el águila que devora su hígado es el álter ego del sujeto, en una guerra consigo mismo que resulta en un cansancio infinito (Prometeo cansado).

El exceso de positividad se traduce en hiperactividad y multitasking, lo cual no es progreso, sino una regresión que destruye la capacidad de atención profunda y la vita contemplativa. Esta aceleración es intolerante al aburrimiento profundo, que es esencial para la cultura y el proceso creativo.

Han propone que la única salida a este agotamiento es un cansancio fundamental (o cansancio que separa). Este cansancio fundamental implica la potencia negativa (Nicht-zu), la capacidad de no hacer, ejemplificada en la máxima de Bartleby: "Preferiría no hacerlo". Esta negación ofrece un "entre-tiempo" que rejuvenece y permite el pensamiento y la reflexión, imposibles en la hiperactividad del rendimiento.

 

5. Reseña: De las hegemonías a la ideología. Varones judicializados que renuncian a sus propias violencias: el caso de Uruguay

  • Nombre de la Obra: De las hegemonías a la ideología. Varones judicializados que renuncian a sus propias violencias: el caso de Uruguay.
  • Autor: Darío Ibarra Casals.
  • Año de Edición: 2016.

Contexto en la Diplomatura Esta obra es clave para la Unidad 1, al enfocarse en los patrones de la socialización genérica masculina que naturalizan la violencia, y en la metodología de intervención grupal (modelo CECEVIM). Aborda la transformación subjetiva necesaria para que los hombres abandonen la violencia.

Análisis de Contenido El artículo de Ibarra Casals se centra en el trabajo grupal de reeducación para varones judicializados por violencia intrafamiliar en Uruguay. El modelo de intervención utilizado es el del Centro de Capacitación para Erradicar la Violencia Intrafamiliar Masculina (CECEVIM).

La propuesta central es que el abandono de la violencia requiere un tránsito subjetivo de la hegemonía a la ideología.

  • La Hegemonía representa el conjunto de prácticas sociales no conscientes y naturalizadas, ligadas al pasado y la rigidez psíquica (falogocentrismo), que buscan mantener la dominación patriarcal (ej. provisión económica exclusiva, homofobia, represión de emociones).
  • La Ideología es concebida como una utopía consciente de equidad y alteridad, un ideal inalcanzable pero visible que promueve la (re)construcción de las relaciones en el presente (ej. economía compartida, desarrollo de empatía y expresión emocional).

Aunque muchos varones llegan por sugerencia judicial (judicializados), el trabajo busca capitalizar su sufrimiento y frustración como motor para el cambio. La meta es que los participantes alcancen el Nivel 5 de insight emocional, que implica el reconocimiento pleno de la responsabilidad por el daño provocado a la expareja e hijos/hijas.

El proceso de cambio confronta las exigencias hegemónicas del varón sobre su pareja, como la demanda de confirmación de su autoridad, la exclusividad y la provisión de recursos. La confrontación de estos patrones genera una intensa "herida narcisista" en el varón, ya que amenaza su identidad ligada a la propiedad de la mujer.

Finalmente, el autor subraya que la evolución subjetiva es un flujo constante, y el abandono de la violencia requiere la aceptación de la subordinación (entendida como respeto y acatamiento de los derechos del otro), así como la aceptación de las emociones de dolor, miedo y sufrimiento propio, necesarias para evolucionar hacia una masculinidad equitativa.

 

6. Reseña: Las 7 P's de la violencia masculina

  • Nombre de la Obra: Las 7 P's de la violencia masculina (Las Siete P's de la Violencia de los Hombres).
  • Autor: Michael Kaufman, Ph.D..
  • Año de Edición: 1999.

Contexto en la Diplomatura Este documento se utiliza en la Unidad 1 para analizar los "Mitos, patrones y representaciones que naturalizan la violencia en la socialización genérica masculina". Proporciona un marco estructurado que vincula la violencia masculina a causas sistémicas y psicológicas dentro del patriarcado.

Análisis de Contenido Michael Kaufman propone que la violencia ejercida por los hombres no es un fenómeno aislado, sino que forma parte de la "tríada de la violencia de los hombres". Esta tríada interconectada incluye la violencia contra las mujeres, la violencia contra otros hombres (utilizada para establecer jerarquías) y la violencia interiorizada (autodestructiva). El patriarcado es el sustento estructural que ha naturalizado la violencia como norma.

Kaufman sistematiza las causas de la violencia en siete factores interconectados, o Las Siete P's:

  1. Poder Patriarcal: La base social que utiliza la violencia como medio para asegurar los privilegios de los hombres como grupo.
  2. Percepción de Derecho a los Privilegios: La creencia consciente o inconsciente de que el hombre tiene derecho a ser servido o a obtener placer físico unilateral, lo que justifica la violencia cuando estos "privilegios" son negados.
  3. Permiso: La tolerancia explícita o tácita de la violencia en las costumbres sociales, los códigos legales (leyes laxas o no aplicadas) y la cultura (glamorización de la agresión).
  4. Paradoja del Poder de los Hombres: La forma en que los hombres construyen su poder, basado en la dominación, es paradójicamente una fuente de temor, dolor y aislamiento para ellos mismos. La violencia se convierte en un mecanismo compensatorio para restablecer las credenciales de hombría ante la inseguridad.
  5. Armadura Psíquica que la Masculinidad: La construcción de la masculinidad sobre la base de la distancia emocional y el rechazo a la feminidad genera rígidas barreras del ego, lo que disminuye la capacidad de empatía del hombre.
  6. Masculinidad como una Olla Psíquica de Presión: Las normas masculinas obligan a reprimir emociones (dolor, temor) y a canalizarlas en ira, que es la única emoción validada.
  7. Pasadas Experiencias: La exposición o el padecimiento de violencia en la infancia (presenciar al padre golpear a la madre o sufrir abuso físico) genera patrones de conducta aprendida, donde la ira es la manifestación para eliminar el dolor arraigado.

Kaufman concluye que la erradicación de la violencia requiere un enfoque multifacético: desafiar las estructuras de poder, eliminar el permiso cultural, redefinir la masculinidad (abordando la paradoja del dolor masculino) y promover la participación de los hombres como cuidadores y sustentadores emocionales, siempre en cooperación con las mujeres.


 

Unidad 2

Esta es la bibliografía teórica utilizada en el dictado del tercero de tres módulos de la Diplomatura en Masculinidades desarrollada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Universidad Nacional de Tucumán, dictada en 2025. Los siguientes textos corresponden a la Unidad 2: Bases comunes de las estrategias de intervención de programas de atención a HEV.


Reseña: Un Acercamiento al Abordaje Teórico/metodológico de la Violencia de Género Masculina.

Autor: F. Huerta Rojas. Año de Edición: 2020. Contexto de la Unidad 2: Este texto contribuye a los "Fundamentos teóricos para la intervención en violencias" y los "Fundamentos metodológicos".

El trabajo de Huerta Rojas (2020) proporciona un marco teórico/metodológico esencial para comprender la violencia de género masculina. El autor, en el contexto de la organización Hombres por la Equidad, sitúa la violencia como un fenómeno inherentemente político y estructural, enraizado en el orden patriarcal. La vida cotidiana es identificada como el escenario central donde se legitima y normaliza la violencia, constituyéndose en un contrato social contemporáneo.

El análisis teórico se centra en cómo la violencia masculina se sostiene a través de los pactos patriarcales y la figura del "grupo juramentado", que garantiza la identidad y el dominio de sus miembros. La masculinidad hegemónica sintetiza atributos de poder, dominio y fuerza, donde la sexualidad masculina se articula como una jerarquía basada en la fórmula social de "hombre más dominio y mujer más sumisión". Esta violencia, entendida como un ataque amplio y sistémico, culmina en la forma extrema del feminicidio, exacerbado por la violencia institucional y la impunidad.

El autor enfatiza la necesidad de un compromiso político feminista para erradicar la violencia, y subraya la importancia de la distinción entre la categoría de "víctima" (donde el agresor es el sujeto de acción) y "sobreviviente" (donde la mujer recupera la capacidad de resistir y emplear recursos). Se identifican también mitos comunes que ocultan la gravedad de la violencia, como considerarla un "asunto familiar privado" o producto de enfermedades mentales o alcoholismo. La erradicación de la violencia requiere, por lo tanto, la transformación de la condición genérica de los hombres a través de una reflexión profunda.

 

Reseña: Espacios de Atención a varones que ejercieron violencia por razones de género. Insumos teóricos y prácticos para su creación e implementación.

Autor: El contenido fue elaborado en el marco del programa Masculinidades por la Igualdad (Gobierno de la Provincia de Santa Fe), con contribuciones de Daniela Viña y Matías De Stéfano Barbero. Año de Edición: 2017. Contexto de la Unidad 2: Esta obra es fundamental para los "Fundamentos metodológicos", la "Construcción de protocolos y herramientas específicas" y las "Recomendaciones para una intervención transformadora".

Este documento (2017) establece los lineamientos políticos y prácticos para la implementación de servicios integrales de atención a varones que ejercen violencias por razones de género (VBG). La propuesta se enmarca en una perspectiva de género feminista, de derechos humanos y antipunitiva, buscando la transformación de los patrones socioculturales masculinos que sostienen la VBG.

El texto critica las explicaciones que ligan la violencia a factores puramente biológicos ("ni tan monos") o a patologías individuales ("ni tan locos"), señalando que la violencia es una expresión del sistema patriarcal, y que la prevalencia de psicopatologías en agresores es similar a la de la población general. La violencia, en este marco, emerge de la dificultad del varón para soportar la vulnerabilidad y para construir el conflicto, recurriendo a la imposición.

Metodológicamente, se promueve el dispositivo grupal psicosocioeducativo, que aprovecha la homosocialidad masculina para facilitar la reflexión y la ruptura de la competencia hegemónica. La intervención debe ser multidimensional, abordando las esferas conductual, cognitiva, emocional, y las historias de vida de los participantes. Es crucial la evaluación dinámica de riesgo, y se establecen criterios claros de exclusión para garantizar la seguridad y la agrupabilidad, como en casos de abuso sexual infantil (ASI) o rasgos psicopáticos/sociopáticos que limitan la empatía y la responsabilización. El objetivo final es la no reincidencia, el reconocimiento y la responsabilización por las conductas violentas.

 

Reseña: Tratamiento Psicológico a Hombres que Ejercen Violencia de Género: Criterios Básicos para Elaborar un Protocolo de Intervención.

Autor: Andrés Quinteros. Año de Edición: 2010. Contexto de la Unidad 2: Aporta criterios básicos para la "Construcción de protocolos y herramientas específicas para el trabajo con HEV".

El artículo de Quinteros (2010) establece los criterios de calidad y los principios éticos indispensables para elaborar protocolos de intervención eficaces con hombres que ejercen violencia de género (VBG). La premisa fundamental es que la VBG es una conducta instrumental, aprendida y deliberada, cimentada en el desequilibrio de poder del patriarcado, lo que justifica su desaprendizaje y el trabajo terapéutico.

El objetivo central del tratamiento es la seguridad y protección de la víctima. Los programas deben ser específicos, intensivos y poseer una perspectiva de género innegociable, además de estar integrados en la red asistencial y contar con formación profesional especializada para evitar actitudes paternalistas o justificaciones implícitas.

El tratamiento debe ser adaptable, y su duración debe estar determinada por el cumplimiento de objetivos lógicos (estimándose un promedio de un año y medio) y no por un cronograma fijo. El autor destaca los desafíos terapéuticos, como la alta resistencia del agresor a través de la negación, minimización y externalización de la responsabilidad, junto con una rigidez identitaria y restricción emocional.

La intervención debe enfocarse en tres ejes transversales:

  1. Construcción de una Nueva Identidad: Deconstruir la identidad machista, analizando la historia familiar y los traumas.
  2. Motivación para el Cambio: Utilizar el Modelo Transteórico del Cambio (MTC) de Prochaska y DiClemente para guiar las estrategias específicas en etapas como la precontemplación y la acción.
  3. Trabajo Emocional: Lograr que el agresor conecte y verbalice sus emociones, que culturalmente se transforman en ira, utilizando técnicas vivenciales para facilitar el insight y la expresión.

 

Reseña: Ítems de género para valorar situaciones de violencia - Versión Revisada.

Autor: Lic. Sandro Comba y Mgter. María Belén Gauna. Año de Edición: 2020/2021. Contexto de la Unidad 2: Es un ejemplo crucial de "La construcción de protocolos y herramientas específicas para el trabajo con HEV".

Esta obra (2020/2021) surge de la necesidad de reorientar la evaluación de la violencia ejercida por varones desde una perspectiva de género. Los autores proponen sustituir el concepto tradicional de "peligrosidad" (visto como ambiguo y ligado al positivismo criminológico) por el de "valoración de riesgo de violencia". Este cambio se justifica porque el comportamiento violento se considera multifactorial, siendo cruciales los factores socioculturales y las creencias sexistas.

La contribución metodológica central es el desarrollo del instrumento "ítems de género". Los autores argumentan que las creencias misóginas de los agresores no deben llamarse "distorsiones cognitivas", un término que sugiere una patología individual. En cambio, proponen el término "ítems de género", ya que el varón agresor actúa como un "portador y ejecutor privilegiado de los mandatos culturales patriarcales".

El instrumento busca valorar el riesgo de nuevos episodios de violencia analizando categorías psicosocioculturales como: mitos, la concepción clásica de la familia (varón hegemónico) y el rol de la mujer en la sociedad. El texto también aborda los factores de riesgo frecuentes en agresores de pareja, como la justificación de la conducta, los déficits emocionales, el aislamiento social, la baja autoestima, la dependencia emocional y los celos patológicos. Además, detalla la alta prevalencia de Trastornos de Personalidad (TP) en sujetos condenados por violencia grave, aunque enfatiza que la perspectiva de género es esencial para ir más allá de la explicación puramente clínica.


Reseña: HOMBRES QUE CONSUMEN CUERPOS DE MUJERES. Mercancía sexual, víctimas de trata y explotación en La Pampa, Madre de Dios.

Autor: Lizeth Vergaray Arévalo. Año de Edición: 2021. Contexto de la Unidad 2: Se relaciona con los "Fundamentos teóricos para la intervención en violencias", al ofrecer un marco de interseccionalidad y masculinidad en contextos extremos de explotación.

El estudio de Vergaray Arévalo (2021) se centra en la participación masculina en la explotación sexual y la trata en La Pampa, Perú. La obra desarrolla el concepto de "masculinidad hegemónica subordinada", donde la dominación masculina y la subordinación coexisten en el mismo sujeto. Los hombres mineros ilegales ejercen una hegemonía (a través de la compra de sexo y la hipersexualidad) pero son simultáneamente subordinados debido a la explotación laboral extrema, la pobreza y la exclusión socio-racial que sufren en este contexto androcéntrico.

El trabajo desglosa el capital masculino, que se sostiene en mandatos clave como el rechazo al mundo femenino y la homosexualidad receptiva, la hipersexualidad activa y el rol de proveedor. La sexualidad se concibe como una fuerza "irrefrenable" que justifica la compra de sexo y la objetivación de mujeres y adolescentes, que son vistas como mercancía disponible. Los clientes refuerzan el pacto patriarcal al negar la explotación y responsabilizar a las víctimas por su situación.

La investigación se basa en el Modelo Ecológico para comprender cómo factores macroestructurales (ausencia estatal, impunidad) y contextuales (zonas masculinizadas como la mina y los prostibares) permiten que se mantenga la demanda de cuerpos de mujeres. El autor insta a la generación de evidencia con enfoque de interseccionalidad para entender las diversas masculinidades y abogar por políticas públicas que desmantelen las relaciones jerarquizadas.

 

Reseña: Un modelo ecológico integrado para comprender la violencia contra las mujeres.

Autor: Carmen Vives Cases. (El artículo analiza el marco teórico de Lory L. Heise, 1998). Año de Edición: 2011. Contexto de la Unidad 2: Ofrece el marco de los "Fundamentos teóricos para la intervención en violencias" a través de un enfoque sistémico.

El artículo de Carmen Vives Cases (2011) promueve la adopción del Modelo Ecológico Integrado de Lory L. Heise (1998) para estudiar la violencia contra las mujeres (VCM). La VCM se define como un fenómeno polifacético y una grave vulneración de los derechos humanos y un problema de salud pública, intrínsecamente ligado a la desigualdad de género y al Patriarcado.

El modelo ecológico actúa como una herramienta heurística que organiza los factores determinantes de la VCM en cuatro niveles interconectados:

  1. Nivel 1 (Historia Personal): Incluye sufrir malos tratos o presenciar violencia conyugal en la infancia, siendo el aprendizaje intergeneracional de la violencia un factor de riesgo muy consistente.
  2. Nivel 2 (Microsistema): Se refiere al entorno inmediato, incluyendo la dominación masculina en el hogar, el control del patrimonio y el conflicto conyugal.
  3. Nivel 3 (Exosistema): Factores contextuales amplios, como el bajo estatus socioeconómico/desempleo y el aislamiento.
  4. Nivel 4 (Macrosistema): Factores socioculturales que subyacen a todos los demás, como la aprobación de la violencia interpersonal, los roles de género rígidos y la creencia del derecho del hombre sobre la mujer.

La autora señala que la desigualdad de género y el Patriarcado subyacen e impregnan todos estos niveles de riesgo. Se subraya la necesidad de mejorar la calidad metodológica de las investigaciones, especialmente aquellas que analizan el vínculo entre el alcohol y la violencia (a menudo sobrevalorado), y se enfatiza que la descripción de las causas multifactoriales de la VCM es crucial para mejorar la eficacia de las intervenciones.


 

Unidad 3

El siguiente material constituye la bibliografía teórica utilizada en el dictado del tercero de tres módulos de la Diplomatura en Masculinidades desarrollada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Universidad Nacional de Tucumán, dictada en 2025. Las reseñas corresponden a los textos seleccionados para la Unidad 3: Debates en las políticas públicas acerca del trabajo con varones que ejercen violencia.

 

1. Reseña: Masculinidad e igualdad de género

Obra y Autor: Masculinidad e igualdad de género (2022), de Gloria Careaga Pérez. Este capítulo forma parte de la obra coordinada por Griselda Gutiérrez Castañeda, titulada Políticas de la masculinidad: El poder y la violencia en la subjetividad de los varones.

Contexto en la Diplomatura: Este texto se inscribe en la Unidad 3 de la diplomatura, dedicada a analizar las Políticas públicas en relación con las intervenciones con varones que ejercen violencia. El texto proporciona un marco político estructural para evaluar los límites y desafíos de dichas intervenciones.

Resumen y Análisis:

La obra de Careaga Pérez examina el desarrollo y la implementación de las políticas internacionales de igualdad de género, y la necesaria, aunque postergada, incorporación de los varones en estos procesos. El análisis parte del reconocimiento de los avances logrados en la participación de las mujeres en diversos ámbitos (trabajo, administración pública), impulsados por acuerdos internacionales como la Conferencia de El Cairo de 1994.

La autora presenta una conclusión incisiva: a pesar de la creciente participación femenina, la estructura de poder que sostiene las desigualdades de género y la injusticia social sigue en gran medida intacta. Las políticas han permitido la inclusión de las mujeres sin lograr transformar las estructuras institucionalizadas que mantienen la posición patriarcal del varón. La incorporación de la perspectiva de género ha enfrentado una fuerte resistencia conservadora que ha intentado generar un "pánico moral" al percibir la emancipación femenina como una amenaza a los principios tradicionales.

Un foco central de la obra es la crítica a la ausencia histórica de los hombres en las políticas de desarrollo que buscan la igualdad. En América Latina, aunque han proliferado los estudios de masculinidad, el trabajo con varones a menudo se ha centrado en temas específicos como la violencia o la paternidad, con una orientación predominantemente psicológica que ha evitado incorporar metodologías feministas con una clara vocación de cambio social.

Careaga Pérez subraya que la transformación social profunda requiere una estrategia articulada de incidencia política y una resignificación del concepto mismo de género. Se advierte que los hombres que buscan cambiar sus comportamientos sin apoyo institucional y social pueden ser percibidos como "traidores", lo que ilustra la rigidez del sistema hegemónico. El desafío es que los varones analicen y desafíen activamente las desigualdades de poder para evitar que los logros se limiten a una mera reedición del sistema patriarcal.

 

2. Reseña: Las 7 P's de la violencia masculina

Obra y Autor: Las 7 P's de la violencia masculina (Octubre de 1999), por Michael Kaufman, Ph.D..

Contexto en la Diplomatura: Este texto se incluye en la Unidad 3 de la diplomatura, donde se debaten las Políticas públicas y las lógicas de intervención. El marco de las "Siete P's" (Poder, Percepción de Privilegios, Permiso, Paradoja, Armadura Psíquica, Olla Psíquica de Presión y Pasadas experiencias) proporciona un modelo analítico sistémico que va más allá de la patología individual, esencial para diseñar políticas de abordaje transformadoras.

Resumen y Análisis:

La obra de Michael Kaufman presenta un análisis exhaustivo de los orígenes y la perpetuación de la violencia ejercida por los hombres, conceptualizándola como la "tríada de la violencia de los hombres": violencia contra mujeres, violencia contra otros hombres, y violencia interiorizada (autodestructiva). Kaufman sostiene que esta tríada está intrínsecamente ligada a las sociedades patriarcales.

El núcleo de la propuesta se estructura en las Siete P's, que son los mecanismos que perpetúan esta violencia:

  1. Poder Patriarcal: Es el fundamento estructural que naturaliza la violencia como norma y la utiliza para asegurar el ejercicio continuo del poder y el disfrute de privilegios.
  2. Percepción de Derecho a los Privilegios: La violencia es una consecuencia de la creencia (consciente o inconsciente) de que el hombre tiene derecho a ciertos servicios o placeres unilaterales (ej., ser servido o la agresión sexual).
  3. Permiso: La violencia prevalece porque existe una tolerancia tácita o explícita en las costumbres sociales, los códigos legales (leyes laxas o no aplicadas) y la glamorización cultural (cine, deporte).
  4. Paradoja del Poder de los Hombres: El sistema patriarcal, aunque confiere poder, es también una fuente de dolor, temor y aislamiento para los hombres. La violencia se convierte en un mecanismo compensatorio para restablecer el equilibrio masculino ante el fracaso o la inseguridad.
  5. Armadura Psíquica que la Masculinidad: La socialización masculina exige distancia emocional, un rechazo a la feminidad (cualidades de cuidado). Esto crea "rígidas barreras del ego" que disminuyen la capacidad de empatía, permitiendo al agresor no experimentar el dolor que inflige.
  6. Masculinidad como Olla Psíquica de Presión: Las emociones consideradas débiles (temor, sufrimiento) son reprimidas y canalizadas violentamente, transformándose en ira, la única emoción validada para muchos hombres.
  7. Pasadas Experiencias: La exposición a la violencia en la infancia, ya sea presenciando el maltrato a la madre o padeciendo abuso físico, inculca la idea de que la ira puede eliminar el dolor o que es posible lastimar a una persona amada.

Kaufman concluye que poner fin a la violencia requiere desmantelar las estructuras de poder y privilegios masculinos y redefinir la masculinidad, trabajando con hombres agresores con compasión, respeto y un claro desafío a sus normas destructivas.

 

3. Reseña: Incorporar la perspectiva de género en la equidad en salud: un análisis de la investigación y las políticas

Obra y Autor: Incorporar la perspectiva de género en la equidad en salud: un análisis de la investigación y las políticas (2005), cuyos autores son Gita Sen, Asha George y Piroska Östlin. La publicación fue emitida originalmente como Engendering health equity: A review of research and policy en 2002.

Contexto en la Diplomatura: Este texto es parte de la bibliografía de la Unidad 3, enfocada en el análisis de las políticas públicas. Proporciona una perspectiva crítica sobre cómo la categoría de género debe ser integrada en el diseño de políticas de salud, un área clave para las intervenciones con varones violentos (HEV), y discute la "paradoja del género".

Resumen y Análisis:

El trabajo de la OPS (2005) aborda la necesidad crítica de integrar la perspectiva de género en la investigación y las políticas de salud para alcanzar la equidad. La tesis central es que el género, entendido como relaciones desiguales de poder y estructuras sociales, es un determinante fundamental de los resultados de salud. El análisis de género debe ser interseccional, evitando aislar el género de otros determinantes como la clase social, la raza o la orientación sexual, que actúan como multiplicadores de las vulnerabilidades.

La investigación convencional a menudo ha fracasado al enfocarse solo en lo individual, lo que ha generado sesgos que se manifiestan como "silencios" y "enfoques parciales". Ejemplos de estos sesgos incluyen el lento reconocimiento de problemas de salud que afectan desproporcionadamente a mujeres pobres (como ciertas infecciones o la contaminación del aire en locales cerrados), o el sesgo reproductivo en salud mental que atribuye la depresión a características biológicas femeninas, ignorando factores sociales como la violencia.

El texto aborda la aparente "paradoja del género", donde las mujeres presentan mayores tasas de morbilidad, pero los hombres tienen una mayor mortalidad prematura (entre 15 y 59 años) a nivel mundial. Esta mortalidad masculina se atribuye a comportamientos sociales de riesgo más comunes entre los hombres (consumo de tabaco y alcohol, exceso de velocidad). Sin embargo, se enfatiza que la paradoja no es universal, ya que en contextos de pobreza extrema, las mujeres pueden tener un riesgo de muerte más alto que los hombres.

Para promover políticas justas, los autores recomiendan la desagregación sistemática de datos por sexo y la aplicación de dos principios de política: cuando la diferencia biológica interactúa con determinantes sociales, se justifica un tratamiento sensible a esas necesidades; y si no hay una razón biológica verosímil, debe exigirse un tratamiento diferente para superar la discriminación social histórica.

 

4. Reseña: Violencias y familias. Implicancias del trabajo profesional: el cuidado de quienes cuidan. Capítulos 1 y 3

Obra y Autor: Violencias y familias. Implicancias del trabajo profesional: el cuidado de quienes cuidan, Capítulos 1 y 3 (Año aproximado de edición: 2012), por Susana Velázquez.

Contexto en la Diplomatura: Este texto es fundamental en la Unidad 3, ya que aborda el trabajo personal del equipo interventor y los nudos críticos que afectan la práctica profesional en el campo de la violencia de género. Proporciona una base ética y metodológica para el cuidado de los profesionales que trabajan con varones que ejercen violencia.

Resumen y Análisis:

Susana Velázquez aborda la violencia intrafamiliar como un grave problema social y de salud pública. El texto se enfoca en la paradoja generada por la contradicción entre la realidad de la violencia y la idealización cultural de la familia como espacio de protección, lo que facilita el ocultamiento de los malos tratos. La autora afirma que la violencia dentro de la familia es intrínsecamente ligada a los determinantes de género y las relaciones desiguales de poder, control y dominio entre varones y mujeres.

Velázquez critica los enfoques que desvían la atención de la causa estructural (la desigualdad de poder), como el análisis centrado en la "disfunción familiar" o la promoción de la conciliación, la cual niega el acecho de la violencia y favorece al agresor. También critica las categorizaciones lingüísticas engañosas:

  • Violencia Doméstica/Familiar: Despolitiza los hechos y encubre al verdadero protagonista, que es el varón que ejerce el control y la dominación. Se propone usar "familias o mujeres en situación de violencia".
  • Mujer Golpeada: Asigna una identidad definida por el agresor.
  • Indefensión Aprendida: Corre el riesgo de asociar a la mujer con estereotipos de pasividad, cuando su falta de defensa es a menudo producto del trauma excesivo o el temor a represalias más severas.

La autora identifica "nudos críticos" en la práctica profesional. Los profesionales pueden revictimizar a las consultantes al emitir juicios de valor basados en sus propios ideales familiares, lo que requiere un trabajo deconstructivo permanente sobre las nociones culturales de la familia y el género. Es indispensable una formación específica con perspectiva de género (incluyendo el marco de la Convención de Belém Do Pará).

Un concepto clave es la Violencia Simbólica (siguiendo a Bourdieu), que es la imposición de sentidos hegemónicos (ej., roles rígidos de género) y que puede ser ejercida por los propios profesionales no especializados (ej., la lentitud judicial o la naturalización de síntomas femeninos en salud).

Finalmente, el texto enfatiza el "cuidado de quienes cuidan", destacando la necesidad de implementar estrategias preventivas y de protección para los profesionales, ya que el contacto continuo con el trauma (el "efecto de ser testigo") provoca efectos somáticos y psíquicos que deben ser abordados.


 

Unidad 4

Reseñas bibliográficas para cada uno de los textos analizados en el apartado “Unidad 4” de la bibliografía de la diplomatura. Ambos textos constituyen la bibliografía teórica utilizada en el dictado del tercero de tres módulos de la Diplomatura en Masculinidades desarrollada por Gabriela Córdoba y Darío Casals en la Universidad Nacional de Tucumán, dictada en 2025.

 

Reseña: Guía de LINEAMIENTOS BÁSICOS PARA ESPACIOS DE ABORDAJE QUE TRABAJAN CON VARONES QUE EJERCEN VIOLENCIA POR MOTIVOS DE GÉNERO. Herramientas para la evaluación y el desarrollo de abordajes integrales en dispositivos grupales.

Autor: L. Carrasco. Año de Edición o Producción: 2018.

Contexto en la Diplomatura: Este trabajo es un texto fundamental en la Unidad 4: Herramientas específicas del trabajo con varones en violencia basada en género, donde se abordan las metodologías de intervención grupal y las estrategias actuales para trabajar con varones agresores.

Análisis de Contenido

La guía de lineamientos básicos de L. Carrasco (2018) es un documento integral diseñado para profesionales que establecen espacios de abordaje especializados dirigidos a varones que ejercen violencia por motivos de género (VeVG). El enfoque central es la implementación de dispositivos grupales para la intervención, buscando un abordaje integral que se articule en torno a un marco teórico robusto y herramientas de evaluación detalladas.

El texto configura un encuadre de trabajo claro, que debe partir de una perspectiva teórica que contextualiza la violencia de género desde sus manifestaciones más letales, como el Femicidio/ Transfemicidio/Travesticidio. Para comprender los patrones de la violencia, la guía incorpora modelos explicativos como el Iceberg de la Violencia (para ilustrar las manifestaciones) y el Ciclo de la Violencia. Este ciclo se desglosa en cuatro fases: Acumulación, Explosión, Externalización y Reconciliación.

El proceso de trabajo se estructura en una rigurosa fase de Evaluación de los VeVG. Para ello, el documento presenta un Instrumento de Admisión específico, que es esencial para la fase inicial. La metodología central se enfoca en el dispositivo grupal psicosocioeducativo o psicosocioterapéutico. El trabajo detalla los Tipos de Dispositivo Grupal y ofrece una serie de consideraciones operacionales para su desarrollo.

Una conclusión esencial del documento es la necesidad de establecer Encuadre y Resguardos del Equipo de Trabajo. Reconociendo que el abordaje de la violencia es una problemática sensible, se considera crucial implementar marcos que protejan la integridad y el funcionamiento del personal profesional involucrado. En resumen, esta guía proporciona las herramientas para la evaluación y la estructuración de abordajes integrales en dispositivos grupales, cumpliendo un rol clave en la formación de profesionales que buscan desmantelar los patrones de violencia de género.


Reseña: DIVERSIDAD LGTBIAQ+ Y BUENOS TRATOS EN LAS AULAS. Herramientas educativas para personal docente.

Autor: Iván Gómez Beltrán, en colaboración con XEGA “Xente Astur LGTBI+”. Año de Edición o Producción: 2025 (Depósito legal: AS 01289-2025).

Contexto en la Diplomatura: Este material se incluye en la Unidad 4: Herramientas específicas del trabajo con varones en violencia basada en género. Aunque se enfoca en la educación, su relevancia reside en el análisis de cómo la masculinidad normativa y rígida se basa en la homofobia y contribuye a la violencia estructural, siendo indispensable para la deconstrucción de la masculinidad hegemónica.

Análisis de Contenido

La guía, elaborada por Iván Gómez Beltrán (2025), es un recurso pedagógico que establece herramientas y estrategias para el abordaje inclusivo de la diversidad LGTBIAQ+ en el ámbito educativo. El trabajo se centra en el concepto de "buenos tratos" como eje metodológico, entendiéndolos como el ejercicio consciente del cuidado y respeto, vital para crear espacios libres de miedo y vergüenza.

La obra rechaza la neutralidad pedagógica, afirmando que toda práctica educativa es inherentemente política y debe comprometerse con la justicia social. Analiza la diversidad a través de cuatro dimensiones interrelacionadas: cuerpo sexuado, identidad de género, atracción y expresión exterior.

El texto aborda la violencia desde una perspectiva estructural, especialmente en el contexto del acoso escolar LGTBIAQ+fóbico, el cual es considerado una violencia estructural aprendida y reproducida. Utiliza el modelo del Iceberg de la Violencia para demostrar que la violencia más visible (agresión física, asesinato) se sustenta en violencias invisibles y normalizadas, como el humor LGTBIAQ+fóbico o la invisibilización curricular.

En el marco de la masculinidad, la guía establece una conexión directa entre la LGTBIAQ+fobia y la masculinidad rígida o normativa. El rechazo al colectivo LGTBIAQ+ es un mecanismo que asegura una identidad masculina concreta, dado el miedo de los hombres a ser feminizados o llamados "maricón" por la presión grupal. El autor concluye que este modelo de masculinidad es nocivo, ya que fomenta la soledad, la represión emocional y la invulnerabilidad obligatoria. Además, la guía promueve la interseccionalidad como herramienta analítica, permitiendo comprender cómo la LGTBIAQ+fobia se cruza con otras opresiones (como machismo, racismo o capacitismo). En el ámbito de la intervención, se recomienda a los docentes el acompañamiento del alumnado y la gestión de las voces hostiles.

 

sábado, 4 de octubre de 2025

Módulo 2, clase 4. Masculinidades y paternajes posibles. Diplo C&C

 

Este material ha sido producido a partir de notas de clase y corresponde a la cuarta y última sesión del segundo de tres módulos que integran la Diplomatura Universitaria en Masculinidades con Enfoque de Género, dictada por Gabriela Córdoba y Darío Casals durante 2025 en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT).

El Curso 2 se titula "Masculinidades y Cuidados", y la sesión del sábado 4 de octubre de 2025 abordó la Unidad 4: Masculinidades y paternajes posibles. Prácticas instituyentes de masculinidad en la infancia. Posiciones paternas. Paternidades activas y su incidencia en las prácticas de cuidado.

La abordó la evolución de la paternidad tradicional que se articulaba en torno a la provisión económica y el autoritarismo, y que ejercía el afecto desde una "distancia emocional" o mediado por la madre. Frente a la erosión del paradigma del varón proveedor único y la interpelación feminista, la clase analizó las dimensiones biológicas, sociales, culturales y emocionales de la paternidad actual. El debate principal se centró en el obstáculo cultural de la dimensión emocional y en los desafíos de la "generación sándwich" que intenta construir un rol paterno consciente en constante tensión con el modelo heredado.

 

I. Paternidad Tradicional y la Crisis del Rol Proveedor (Gabriela Córdoba)

La primera parte de la sesión se centró en la evolución histórica y las dimensiones de la paternidad en el marco de la masculinidad hegemónica.

El Modelo Patriarcal y el "Amor a Distancia"

Históricamente, la organización familiar, sustentada en la lógica patriarcal y el ideal del amor romántico, separó las responsabilidades de provisión y cuidado en función del género.

  • Roles Asignados: La madre se consolidó como una figura exclusiva y excluyente en la crianza. El padre, en su rol de proveedor, se distanció del cuidado afectivo y doméstico.
  • Mandatos de Dominación: La función paterna se asoció al poder, la autoridad, la protección y el acceso a recursos (económicos, políticos, simbólicos), alineándose con los mandatos de la masculinidad hegemónica.
  • Guion Social: Esto generó representaciones de paternidad centradas en el autoritarismo y la provisión, pero desprovistas de legitimidad para el cuidado cotidiano. El amor paterno se ejercía desde una distancia afectiva ("amor a distancia") o estaba mediado por la madre ("traductora emocional").

La Paternidad como Construcción Cultural y el Desafío Emocional

La paternidad hoy se define como un rol y una responsabilidad multidimensional que abarca aspectos biológicos, sociales, culturales y, crucialmente, emocionales.

  • Erosión del Paradigma: Cambios sociales, como el aumento de hogares monomarentales y la interpelación de los movimientos feministas y LGBTTIQ+, han erosionado el modelo del varón autoridad inapelable y proveedor único.
  • Persistencia de Estereotipos: La pandemia de COVID-19 demostró que la mera presencia física de los varones no garantizó la redistribución del cuidado, que continuó recayendo en las mujeres, evidenciando la necesidad de cambios subjetivos y culturales profundos.
  • El Gran Obstáculo (Dimensión Emocional): El desafío principal para la participación activa y consciente de los varones radica en la dimensión emocional. La masculinidad tradicional limitó históricamente la expresión de amor y ternura, asociándola con la debilidad o vulnerabilidad. Esto resulta en padres que ofrecen guía racional ("bajaba línea") pero carecen de escucha empática y sostenimiento emocional.
  • Paternidad Autónoma: Es esencial que la paternidad se conciba como un compromiso autónomo con los hijos y no como un vínculo mediado o dependiente de la relación con la madre.

 

II. Posiciones Paternas: La Tensión de la "Generación Sándwich" (Darío Casals y Debate Grupal)

Darío Casals y los participantes analizaron las dificultades de los varones contemporáneos para desprenderse de los modelos paternos heredados.

1. La Generación Bisagra

Los varones que fueron educados por padres de las generaciones rígidas (años 70, 80 o 90) se ven obligados a construir un nuevo modelo paterno basándose en la oposición (hacer lo contrario) o la idealización de lo que creen que sería saludable.

  • Tensión Permanente: Esta generación fue etiquetada como la "generación sándwich" o "generación bisagra". El esfuerzo constante radica en "vivir en esa tensión permanentemente" para encontrar un equilibrio.
  • Retorno al Viejo Paradigma: Darío Casals advirtió que dar un "giro de tuerca" para ser un padre consciente y empático es difícil. Ante una crisis o una situación adversa, se regresa "automática y espontáneamente al viejo paradigma" porque es lo conocido y, a veces, se percibe que "sabemos que funciona".
  • Equilibrio de Roles: El objetivo es evitar los extremos: no ser autoritario, pero tampoco intentar ser el "mejor amigo" del hijo. Se debe mantener la perspectiva multidimensional sin olvidar la "cierta existencia de jerarquía en algunas cosas".

2. El Desafío del Ego y la Evasión

El ejercicio de la paternidad en etapas como la adolescencia puede ser particularmente desafiante, ya que la falta de reconocimiento o la denigración por parte de los hijos puede "hacer bolsa el ego".

  • Respuestas de Distancia: La respuesta frecuente de los varones ante el dolor emocional es tomar distancia, evitar o evadir el conflicto. Esta incapacidad para "soportar con amor" el desafío del hijo es un fallo en la posición paterna.

 

III. Paternidad Activa y Obstáculos Estructurales

La clase enfatizó que la paternidad activa requiere una visión holística del cuidado que impacta en el desarrollo cognitivo, social y emocional de los hijos, y no debe reducirse a la provisión material.

1. La Interpelación sobre la Realidad Material

Se debatió el riesgo de que la falta de recursos se convierta en una justificación teórica para las fallas paternas en varones de bajos recursos.

  • Crítica al Determinismo: El cursante Fernando cuestionó si vincular la carencia material con fallas en la masculinidad caía en el determinismo o si implicaba que se debía asumir que "no podemos trabajar con ellos".
  • Respuesta Estructural: Darío Casals reconoció la complejidad del planteamiento teórico. Sin embargo, el debate concluyó que las condiciones materiales y la falta de apoyo sistémico son obstáculos, y no justificaciones.
  • Mensajes Institucionales: Se citó que la ley, al otorgar solo 5 a 10 días de licencia por paternidad frente a 3 meses para la madre, envía un "mensaje claro de reproducción de la masculinidad hegemónica". La transformación, por lo tanto, debe ser estructural (leyes y políticas públicas) para que la paternidad comprometida sea viable en la clase trabajadora.

2. El Debate sobre el Psicoanálisis y la Función Paterna

Darío Casals introdujo la noción psicoanalítica tradicional (lacaniana) de la función paterna como "corte".

  • La Función Paterna como Corte: El padre es la "interdicción" que debe cortar la "simbiosis materno-infantil" para que el niño pueda desarrollar su identidad e introducirse en el orden simbólico.
  • Crítica Científica: El cursante Augusto criticó esta visión, argumentando que las teorías fundacionales del psicoanálisis (como las de Lacan de 1957) deberían ser revisadas a la luz de los avances de la psicología moderna, ya que la insistencia en ellas obstaculiza la construcción de un nuevo piso teórico más robusto y contextualizado.

 

IV. Análisis del Discurso Social: El Video "Los Ayudadores"

La sesión incluyó una actividad grupal para analizar un video publicitario (parodia) que exponía los micromachismos en el hogar.

1. Reacción Emocional y Polarización

La reacción emocional inicial del grupo fue polarizada.

  • Varones: Se conectaron más rápidamente con el displacer (enojo, rechazo, impotencia).
  • Mujeres: Se conectaron más con la risa.

2. Crítica a la Ridiculización y la Carga Mental

El debate se centró en la efectividad del mensaje para interpelar al público masculino:

  • Validación Femenina: El mensaje resonó más con las mujeres porque funcionó como una denuncia al discurso feminista y a la carga mental (la organización invisible del hogar).
  • Rechazo Masculino: Los varones sintieron que el mensaje estaba ridiculizado. Argumentaron que los hombres contemporáneos han "sofisticado formas de explotación hacia la mujer" y que la caricatura burda no refleja la sutileza de los micromachismos actuales.
  • La Carga Mental en la Frase: Se identificó que la frase típica de los varones, "Decime qué querés que haga", confirma la carga mental de la mujer, pues espera que ella organice el modo en que él debe colaborar. Esto mantiene al varón fuera del circuito de responsabilidad de la vida cotidiana.

3. El Rito de Pasaje Incompleto

El análisis grupal planteó que el rol masculino en el video mostraba una "infantilización". La paternidad, como rito de pasaje, se interpretaba como un tránsito de ser "hijos de la mamá" a ser "hijos de la esposa" o "un hijo más".

 

Conclusión

La clase concluyó que el tránsito hacia una paternidad activa (o comprometida) exige un esfuerzo consciente y permanente por parte de los varones, especialmente de la denominada "generación sándwich". Los varones contemporáneos se encuentran en la difícil tarea de construir nuevos modelos por oposición o idealización, enfrentando el riesgo constante de regresar "automática y espontáneamente al viejo paradigma" ante una crisis, ya que es lo conocido y, a veces, se percibe que "sabemos que funciona". El objetivo es vivir en esta "tensión permanentemente" para encontrar un equilibrio, evitando ser autoritario o caer en el extremo de ser el "mejor amigo" del hijo.

El principal desafío subjetivo para la participación activa radica en la dimensión emocional. Los padres deben trascender el rol de guía racional que históricamente se les asignó (el padre que "bajaba línea" con consejos) y desarrollar la escucha empática y el sostenimiento emocional. Darío Casals subrayó que el ejercicio de la paternidad en la adolescencia es particularmente desafiante, y la incapacidad de "soportar con amor" el desafío del hijo puede llevar al varón a evadir o tomar distancia del conflicto, un comportamiento que, en casos extremos, se interpreta como abandono.

A nivel social y cultural, la clase analizó los micromachismos a través del video "Los Ayudadores". Este análisis grupal destacó la persistencia de la carga mental sobre las mujeres y cómo la frase típica de los varones, "Decime qué querés que haga", confirma que la organización del cuidado sigue recayendo en ellas. No obstante, se señaló que el mensaje del video generó rechazo en los varones por sentirse ridiculizados.

Finalmente, la sesión enfatizó que el cambio debe ser estructural. Se debatió que la transformación no puede recaer solo en la voluntad individual, ya que las condiciones materiales dificultan el ejercicio de una paternidad comprometida en la clase trabajadora. Además, la legislación actual, al otorgar solo 5 a 10 días de licencia por paternidad frente a 3 meses para la madre, envía un "mensaje claro de reproducción de la masculinidad hegemónica". En este marco, se planteó la necesidad de revisar críticamente teorías fundacionales como la función paterna lacaniana (el "corte"), en busca de "teorías más robustas" que permitan construir un nuevo piso teórico para conceptualizar las paternidades.