lunes, 31 de julio de 2006

Pertenecer Luchas de poder y éticas divergentes: el mundo de los Derechos Humanos frente a la violencia de Estado en Salta

 2006


Entre la Sangre y el Estado: Poder, Ética y la Construcción del "Familiar" en los Derechos Humanos

 Por Fernando Pequeño Ragone

En este análisis reflexivo, Fernando Pequeño explora las configuraciones de poder en el campo de los derechos humanos en Salta, partiendo de su propia investidura como nieto del exgobernador Miguel Ragone. El estudio se propone desnaturalizar la categoría de "familiar", revelándola no como una esencia biológica, sino como una construcción sociopolítica legitimada por la "ficción social" del dolor y la sangre.

Pequeño identifica una fractura entre el mundo de los "funcionarios" y el de los "familiares", donde operan lógicas de dominación patriarcal y cooptación estatal. A treinta años del golpe, sostiene que la violencia física ha mutado hacia una dimensión "dóxica" o simbólica, donde el poder utiliza la "racionalidad afectiva" del duelo para minorizar a las víctimas e imponerles un rol predefinido.

El informe expone éticas divergentes: desde la confrontación radical que rechaza al Estado como interlocutor, hasta la integración reparadora que suele ignorar los hilos de la subordinación. Finalmente, propone una resistencia basada en la historización del sujeto, permitiendo que el acto de "pertenecer" surja de la subjetividad singular y no de una abstracción homogenizadora impuesta por el poder.

Escrito para cumplir con la reflexión final en el Seminario sobre Violencia Política dictado por Ludmila Catela Da Silva en 2006 en la Universidad Nacional de Salta. 

Objetivo 

El objetivo de este trabajo, desarrollado por Fernando Pequeño en el marco del seminario, es analizar de manera reflexiva las configuraciones de poder, dominación y las éticas divergentes que operan dentro del campo de los derechos humanos en Salta,. A través de su propia experiencia como nieto del ex gobernador Miguel Ragone, el autor busca desnaturalizar la categoría de "familiar" y comprender cómo la violencia simbólica o "dóxica" permite la cooptación de los sujetos por parte de las estructuras estatales y políticas.

 

Informe de Tesis Principales y Derivadas

1. Tesis sobre la Fragmentación y Tipología del Campo de los Derechos Humanos

El campo de los derechos humanos no es un bloque homogéneo, sino un espacio de luchas de poder dividido primordialmente entre el mundo de los "funcionarios" y el mundo de los "familiares".

  • Derivada: Dentro de los funcionarios, existen jerarquías (políticos, judiciales y académicos) que determinan su visión de la realidad; por ejemplo, en el ámbito judicial, se observa una dominación patriarcal donde las nuevas generaciones de jueces y fiscales están atrapadas en lógicas de "padrinazgo" y reproducción de clase vinculadas a los sectores que se beneficiaron durante la dictadura.
  • Derivada: En el ámbito de los familiares, la legitimidad se construye sobre el factor diferenciador de la sangre y el dolor, creando una jerarquía de "investidura" que otorga autoridad para hablar en el espacio público.

2. Tesis sobre la Naturalización y el "Abuso" de la Categoría de Familiar

La categoría de "familiar" se presenta socialmente como una esencia natural basada en los lazos sanguíneos y el duelo, pero es en realidad una construcción sociológica, política e histórica.

  • Derivada: El uso del dolor como fuente de legitimidad permite que los familiares sean vistos como sujetos con una "racionalidad afectiva" y "desinteresada", lo que les confiere un estatus moral superior, pero al mismo tiempo facilita que sean minorizados o infantilizados por los funcionarios, quienes alegan poseer un "conocimiento experto”.
  • Derivada: El duelo, lejos de ser una emoción privada espontánea, funciona como un deber impuesto por el grupo para fortalecer la cohesión social y la adhesión a las figuras que portan la investidura de víctimas.

3. Tesis sobre la Violencia Dóxica y la Cooptación Estatal

A treinta años del golpe, la violencia política ha mutado de su forma física a una acción dóxica (simbólica), donde la dominación se ejerce a través de la aceptación de categorías impuestas que mapean a los individuos en lugares previamente pensados por el poder.

  • Derivada: Esta violencia simbólica genera una tensión entre la cooptación y la resistencia; los funcionarios (a menudo familiares ellos mismos) quedan atrapados entre sus elecciones racionales para mantener el poder y su deseo subjetivo de justicia, mientras que los familiares temen la "contaminación" política.
  • Derivada: El sistema de dominación utiliza la abstracción homogenizadora del dolor para borrar las trayectorias individuales y las diferencias políticas de las víctimas, reduciéndolas a una masa de "familiares de" legitimados únicamente por el sufrimiento,

4. Tesis sobre las Éticas Divergentes ante el Estado

Existen dos formas opuestas de hacer política y vivir la ética respecto a la relación con el Estado: la confrontación absoluta y la integración reparadora.

  • Derivada: Un sector de familiares ve el acercamiento al Estado como un agravio moral, considerando que las relaciones contractuales o económicas con quien "mató a los suyos" implican una subordinación inaceptable.
  • Derivada: Otro sector opta por integrarse a las estructuras estatales bajo la creencia de que actúan con absoluta libertad para conseguir reparación, a menudo sin percibir los mecanismos de cooptación y los hilos de poder que los atraviesan.

 

Conclusión y Resistencia

El autor concluye que la verdadera resistencia a esta dominación simbólica reside en historizar al familiar y reconocer la singularidad de cada trayectoria individual,. Solo al despojar a los vínculos del "fantasma del dolor y la sangre" es posible construir relaciones autónomas basadas en el reconocimiento mutuo de las subjetividades, permitiendo que el acto de "pertenecer" sea una elección consciente y no una imposición del poder de turno.

Para comprender este proceso, podemos imaginar la categoría de "familiar" no como un lazo natural inamovible, sino como un uniforme de gala que el Estado y la sociedad obligan a vestir: aunque otorga un lugar de honor en el desfile de la memoria, a menudo es tan rígido que impide al sujeto moverse con libertad o ser visto más allá de la prenda que lo cubre.

 

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